Reportaje a Gentil Montaña

El quizás más grande guitarrista colombiano es un hombre sencillo, muy tímido, de esa raza mestiza tolimense a la que le fascina la música de la tierra y que no le pasan los años. Su negra cabellera y su rostro de adolescente darían para pensar que vio la luz en la Ibagué de su alma en la segunda mitad del siglo XX. Pero no. Lo que es realmente sorprendente es el talento de este maestro, que prácticamente por sus propios medios ha logrado ubicar su nombre entre los grandes del mundo. De hecho, el afamado comentarista Richard “Rico” Stover escribió en la respetadísima revista inglesa Classical Guitar Magazine un artículo que deslumbra por lo generoso con este colombiano.

Dice Stover de Gentil Montaña (http://www.gentilmontana.org/) que “es realmente un genio, uno de los compositores para guitarra más talentosos que yo haya escuchado nunca (…)” y lo compara con Agustín Barrios Mangoré, el virtuoso guitarrista y compositor paraguayo. Es tal el talento de Montaña que el gran mecenas de la guitarra clásica y presidente de la prestigiosa casa Caroni Music, el conde Peter Hamilton MacDomhnaill, ya dedicó uno de los números de la publicación Grandes Compositores a este colombiano.

Montaña conserva la sencillez de su tierra y cuando habla de música colombiana, sus ojos dejan ver el brillo del niño que lleva adentro: “Es que la guitarra es mi mejor medio de expresión. Cuando subo al escenario e interpreto la música de mi país, es el momento más feliz”, dice con la sinceridad del que ama lo que mejor sabe hacer.

JCV: Maestro, ¿Cuál es su opinión del estado actual, la composición, de la música de cuerda colombiana?
GM: Está en su mejor momento. Hay toda una camada de jóvenes que componen y que se atreven a innovar. Basta con ir a las tiendas de discos para darse cuenta de la proporción de este movimiento artístico.

JCV: Si es de esas proporciones, ¿por qué no se oyen esas composiciones en la radio comercial, o por qué no llegan las reseñas a los medios masivos?
GM: Supongo que es porque las grandes casas disqueras no saben o no les interesa. Y si no hay ese componente, las obras no llegan a los medios.

JCV: ¿Qué opinión le merece la música de los artistas colombianos, como Shakira o Juanes, que actualmente triunfan?
GM: Lo que ellos cantan y tocan es movido, pero no es música colombiana.

JCV: Pero ¿Carlos Vives y sus vallenatos?
GM: Los vallenatos son música colombiana en su más clara expresión y, es más, admiro a Alfredo Gutiérrez, que le sacó tonos al acordeón que nunca antes se habían oído. Pero después de él, los vallenatos se vienen pareciendo cada vez más a las rancheras, lo cual deja de ser música colombiana.

JCV: Entonces, ¿qué es música colombiana?
GM: La riqueza musical de nuestro país es enorme. En cuanto a mi especialidad, la andina, se caracteriza por su sencillez, naturalidad y porque es un llamado a querer nuestra tierra. Hay que viajar lejos y por un buen tiempo para que un bambuco le conmueva a uno hasta la médula.

JCV: En su concepto, ¿cuál ha sido el compositor más importante de la música andina colombiana?
GM: Luis A.Calvo, por que él, sin mucha academia y sí talento de sobra dejó una música que hoy, 60 años después de su muerte, es un legado vigente. Hay que oír sus Intermezzos para reconocer lo buen músico que fue.

JCV: ¿Usted se considera ortodoxo o innovador en la interpretación y composición de música colombiana de cuerda?
GM: A pesar de que me formé oyendo los clásicos de la primera mitad del siglo XX, las influencias externas me han permeado y por eso me catalogan como un guitarrista de música popular “fusión”.

JCV: ¿En qué proyecto se encuentra actualmente?
GM: Estoy transcribiendo mis obras de guitarra para piano.

JCV: ¿Por qué es importante conocer, conservar y desarrollar el patrimonio musical colombiano, como el representado en la música de cuerda?
GM: Porque es lo de uno, porque representa lo que uno es, de donde viene, sus ancestros… lo demás es de otros, pero la música andina colombiana, es de uno.